Macarena Jiménez, Virginia Manrique
El Informe de la Libertad de Prensa 2012 comunica que el periodismo ha vivido su peor año desde 1995. Noventa informadores y cuarenta y ocho internautas han muerto y casi 300 han sido encarcelados. Los datos sitúan al año 2012 en el peor de los últimos 17 años, señalan a Siria y Somalia como principal responsable de los sucesos.
El número de corresponsales asesinados aumenta significativamente. La guerra civil de Siria, un número récord de homicidios en Somalia, la incesante violencia en Pakistán y la preocupante alza en los casos de periodistas brasileños matados provocan un aumento del 42% de víctimas en reporteros en comparación con años anteriores.
Paul Wood, corresponsal de la BBC, expresa que Siria es uno de los lugares más complicados donde han trabajado. El gobierno de Bashar al Assad, intentó prohibir la entrada de reporteros en la nación, para evitar el flujo de información. Wood y todo el equipo de la BBC tuvo que introducirse de manera clandestina. La policía del estado les persiguió y tuvieron que ocultarse hasta en camiones de verduras para evitar ser asesinados.
Al prohibirse la entrada de reporteros y el control estricto de la prensa nacional por parte del Estado, los periodistas tuvieron que utilizar otros métodos para documentar el conflicto. Más de 13 ciudadanos dedicados a esta profesión pagaron con sus vidas, sus videos han sido reproducidos por muchas organizaciones de noticias internacionales.
Los comunicadores que trabajan en Internet constituyen un tercio de los corresponsales caídos en 2012, aumentando un 20% más que en el año 2011.
En el otro lado del mundo, la “Campaña por un Emblema de Prensa (PEC)”, una organización que busca la protección de los comunicadores en situaciones violentas, señala que México se sitúa como el cuarto lugar más peligroso del mundo para ejercer el oficio. En el pasado año 59 reporteros fueron asesinados.
Asimismo, Brasil, país que históricamente ha sido uno de los más peligrosos para ejercer el oficio del periodismo, incrementa el número de asesinatos a reporteros en comparación con los años anteriores.
Otro de las naciones que destaca por establecer las peores condenas de cárcel a reporteros es Turquía, con 75 encarcelados, de los que se acusa de pertenecer a organizaciones terroristas.
Por otra parte, China sigue encabezando la lista en lo que a la censura e intentos de control hacia la disidencia se refiere.
La presidenta de Reporteros Sin Fronteras España, Malén Anzárez, declara que 2012 ha sido un año “funesto” para el periodismo. “El pasado año ha dejado un penoso y decepcionante panorama en el que tras las esperanzas suscitadas con la Primavera Árabe, hemos visto que todavía en la mayoría de países prevalece una situación conflictiva y dudosa para los medios de comunicación”.
Anzárez ha señalado que España, a pesar de haber subido tres puestos en la clasificación anual de la libertad de prensa de RSF, «no se pueden echar las campanas al vuelo porque también ha sufrido retrocesos debido a las medidas aplicadas por el Gobierno, que han supuesto un paso atrás».